Crisis en Afganistán: La Perspectiva de Ciberseguridad
Si les gustaría donar para ayudar los refugiados afganos, pueden acceder el sitio web del Agencia de la ONU para los refugiados (ACNUR).
Resumen: ¿Qué pasó en Afganistán?
Durante de las últimas semanas, la crisis humanitaria y política en Afganistán ha sido un tema clave en debates entre lideres políticos, los medios, y organizaciones de derechos humanos. En el 15 de agosto de 2021, los combatientes del Talibán asumió el control de la capital afgana de Kabul y ocupó el palacio presidencial unas horas después del Presidente Ashraf Ghani se hubo huido del país. Este cambio del poder provocó la evacuación de más de 100,000 afganos del aeropuerto de Kabul. Los últimos soldados estadounidenses en el país salieron en el martes 31 de agosto, un momento histórico que se fue empañado por los ataques en el aeropuerto unos días antes, los cuales dejaron muertos a unos 60 ciudadanos afganos y 13 soldados estadounidenses.
Mientras el mundo lamenta los que fueron muertos en la violencia y intenta buscar refugio para los que fueron desplazados, la comunidad internacional ahora necesita determinar el pronóstico para el futuro. Hay ciertamente muchos aspectos de la crisis afgana para considerar – lo humanitario, lo político, lo regional, lo económico, etc. Sin embargo, la ciberseguridad es uno de los temas menos discutidos con respecto a la situación en Afganistán. El ascenso al poder del Talibán tiene consecuencias cruciales para la seguridad de información y privacidad de datos. ¿Cuáles tipos de datos puede acceder el Talibán? ¿Cómo los afganos pueden proteger su información privada? ¿El Talibán puede utilizar la tecnología militar estadounidense y otra materia confidencial que fue dejada en Afganistán? Estas son algunas de las preguntas sin respuesta sobre ciberseguridad en Afganistán.
Problemas de Privacidad de Datos
El control del Talibán en Afganistán suscita preocupaciones de privacidad de datos, con respecto a que tipos de información el grupo ahora puede acceder y controlar. Dado la presencia del Talibán dentro del palacio presidencial, el grupo probablemente ahora tiene acceso a los bases de datos digitales nacionales y también la información biométrica. El gobierno afgano adoptaba estas tecnologías después de años de presión política para automatizar sistemas nacionales de identificación y del voto. Sin embargo, información de identificación personal (PII) encontrada dentro de estas herramientas, como software de reconocimiento facial y los escáneres de huellas dactilares y de iris, es confidencial. Cuando esta información caiga en manos equivocadas, se la pueden usar para apuntar y explotar grupos de personas.
Como resultado, unos días después del Talibán invadía Kabul, mucha gente afgana inmediatamente intentaron de borrar sus historias digitales y datos biométricos por preocupaciones de privacidad. Información rutinaria como perfiles de media social, textos, álbumes de foto fue borrada de los móviles, tablas, y computadoras. Recientemente, la organización internacional Human Rights First publicó unos consejos de cómo víctimas pueden evitar el mal uso de sistemas biométricos en Afganistán. Además, hay una amenaza específica del Talibán utilizando bases de datos digitales para identificar funcionarios del gobierno, miembros de las fuerzas armadas y activistas, especialmente puesto que los militantes del Talibán tienen antecedentes de usar datos del gobierno para identificar víctimas. En 2016, antes de secuestrar unos 200 pasajeros del bus en Kunduz, Afganistán, insurgentes del Talibán utilizaron un sistema biométrico del gobierno afgano para asegurarse que ningunos de los pasajeros eran miembros de las fuerzas armadas.
Problemas de Seguridad Nacional de los EEUU
Aunque la mayoría de información confidencial archivada en las computadoras dentro de la embajada estadounidense en Afganistán es probablemente guardada, unos datos privados todavía permanecen en el país. Alguna de esta información fue compartida con el gobierno afgano y otras entidades locales, y por lo tanto, se pueden ser accedida por los bases de datos gubernamentales. Además, otra información fue simplemente dejada en las embajadas durante de la evacuación rápida.
Por otro lado, el orden del presidente Biden para retirar las tropas estadounidenses de Afganistán fue más rápido de lo esperado. Como resultado, equipo militar fue abandonado. Por ejemplo, después de que el Talibán tomara la ciudad de Kunduz en agosto, los militantes también descubrieron unos vehículos militares de los EEUU que habían sido dejados en el aeropuerto. El equipo, que sale billones de dólares, incluyó un vehículo Mine-Resistant Ambush Protected (MRAP), drones, y Humvees.
Mientras estos datos mismos no necesariamente constituyen un problema, los funcionarios de inteligencia de los EEUU se están preocupados por lo potencial de los militantes combinar esta información con otros datos, produciendo un resultado que sí realmente sería una amenaza a la seguridad internacional. Por ejemplo, ¿qué pasaría si el Talibán vendiera esta información a un adversario de los EEUU, como Rusia? Esto pudiera tener consecuencias verdaderas desde un perspectiva de inteligencia nacional estadounidense.
Concluir con un Sentido Más Positivo
“La crisis en Afganistán también nos ha demuestra cómo se pueden utilizar la tecnología para ayuda humanitaria difundida.”
Para concluir con un sentido más positivo, la crisis en Afganistán también nos ha demuestra cómo se pueden utilizar la tecnología para ayuda humanitaria difundida. En las últimas semanas, organizaciones de derechos humanos, los médicos, y gobiernos nacionales se han aprovechados de herramientas digitales para organizar evacuaciones masivas del país, coordinar esfuerzos de socorro, y encontrar refugio seguro. Abajo son algunos ejemplos de cómo la tecnología han sido usado para ayudar a los refugiados afganos.
Echelon Risk + Cyber, una empresa de tecnología basada en Pittsburgh, PA, utilizó comunicaciones de alta velocidad y redes sociales para ayudar unos 50 residentes afganos y sus familias a buscar sitios seguros y refugio en Afganistán.
El gobierno de Singapur ofreció unas de sus aeronaves militares A330 Multi Role Tanker Transport (MRTT) para ayudar a evacuar los residentes afganos. La aeronave MRTT puede transportar 300 pasajeros y 111 toneladas de combustible, la capacidad más grande de todos los aviones cisterna.
Los países que recibían refugiados afganos han utilizado tecnologías médicas para organizar sitios de vacunación COVID-19. En los EEUU, a partir del 26 de agosto de 2021, aproximadamente 8,600 afganos llegaron al Aeropuerto Internacional Washington-Dulles, donde ellos recibieron evaluaciones de salud.
Airbnb, una aplicación móvil que sirve para reservar alojamiento, anunció que guardará alojamiento mundial para 20,000 refugiados afganos. La gente desplazada puede encontrar propiedades en la aplicación o sitio web de Airbnb para reservar un lugar.
Nos queda mucho por hacer con respecto a ayudar la gente de Afganistán y a restituir la estabilidad en la región. Los eventos recientes nos han demuestro la dualidad de tecnología: cómo puede ayudar y cómo puede explotar. La situación en Afganistán también demuestra la guerra moderna, la combinación del mundo físico con lo digital. Y esta forma de conflicto requiere que la comunidad global asegure la protección de sus ciudadanos en ambos mundos.